Hablar de lo valioso en nuestras vidas puede resultar complejo por momentos, pues al ser personas en constante cambio nos vemos reevaluando lo que consideramos o no importante.
Este blog no pretende indicarte si lo que es valioso para ti es apropiado o no, sólo quiere guiarte por un camino en dónde puedas reconectarte contigo mismo, con las cosas que anhelas y desde allí empezar a trazar una nueva ruta en la vida.
¿Qué son los valores?
Para definir el concepto de valores utilizaré el concepto que usa Russ Harris en su libro Hazlo simple, quien define los valores como “son los deseos más profundos de tu corazón sobre cómo quieres comportarte, cómo quieres tratarte a ti mismo, a los demás y al mundo que te rodea”. En otras palabras, es identificar aquello que te mueve a ser tu mismo, esas cosas que tu corazón anhela y por lo que quieres continuar. Los valores no son un objetivo que logras y terminan, por el contrario, son prioridades en tu vida que vas cultivando diariamente.
Avanzar en la identificación de un valor requiere que tengamos dos cosas presentes: las metas y las acciones. Imagina este ejemplo: mi valor es mantener una vida saludable, mi meta entonces sería permanecer con niveles bajos de colesterol y siendo así mis acciones consisten en aumentar el consumo de frutas y verduras, disminuir aquellos alimentos que pudieran contener altos niveles de grasa, entre otros. Y es así como vamos trazando nuestra pirámide para establecer cuáles son los valores que no movilizan a diario.
Si aún resulta un tanto difícil, te sugiero continuar leyendo.
¿Estas viviendo la vida que quieres vivir, en este mismo momento? Detente unos minutos para pensar y responder a esta inquietud. Y es que a veces luchamos con los problemas que la vida nos trae a diario y es como si viviéramos en un constante suspenso de lo que pasará, de lo que lograremos.
“Imagina que vas conduciendo el autobús de “tu vida”. Como en cualquier autobús, a medida que sigues tu ruta, vas recogiendo pasajeros. En este caso, tus pasajeros son tus recuerdos, sensaciones corporales, emociones, pensamientos y cosas por el estilo. Has recogido algunos pasajeros que te caen bien, también has recogido algunos que no te gustan: tienen el aspecto de miembros peligrosos de una banda y tú hubieras preferido que tomaran otro autobús. Es probable que hayas pasado mucho tiempo intentando echar del autobús a determinados viajeros, hacer que cambiaran de aspecto o que se hicieran menos visibles, lo más probable es que ya hayas intentado parar el autobús para hacer que se bajaran esos pasajeros. Pero date cuenta de cuál ha sido la primera cosa que tuviste que hacer para conseguirlo: Tuviste que detener el autobús; tuviste que dejar tu vida en suspenso mientras te centrabas en la lucha(…) Cuando discutimos o intentamos cambiar a los viajeros de nuestro autobús, lo único que hacemos es añadirles aún más cosas. Es como encontrarse con un miembro de una banda y obligarle a que se ponga traje y corbata pero en nuestra memoria, al final, el bandido sigue viviendo con su aspecto original. Una vez que hemos agotado todas las posibilidades, lo que solemos hacer es intentar llegar a un acuerdo con los pasajeros del autobús.
Cuando subas a un autobús, verás que en la parte superior lleva un cartel en el que se especifica a dónde va el autobús. Los pasajeros que suban a ese autobús irán a ese destino. Así, el destino del autobús no depende del capricho de cada momento de los pasajeros sino que corresponde a los propietarios de la compañía y a los conductores determinar el destino y llevar hasta allí el vehículo. Por eso, este es el momento de determinar a dónde quieres que se dirija ese autobús llamado “tu vida”. ¿Qué vas a decidir poner en su letrero? ¿Cuál es tu ruta?”
Recuerda que no todos tenemos la misma prioridad, así que tus respuestas estarán correctas si sientes que te conectan.
¡Te invito a que respondas cada una de las preguntas aquí desarrolladas!
Si se presentan dudas o consideras que necesitas apoyo, recuerda que en el Equipo Trascender estaremos atentos.
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